Al iniciar el mes de agosto, 12 jóvenes originarios de Chile, México y Perú llegaron a Bogotá para intercambiar sus conocimientos con 52 proyectos de emprendimiento creativo. Visitaron las Casas de Juventud y prestaron asesoría de acuerdo a sus áreas de especialidad. Y más allá de los asuntos técnicos, entregaron una parte de sus vidas a los proyectos y se rodearon de personas que comparten esa vocación de dar lo mejor de sí, que es la esencia del voluntariado.
Durante el acto de clausura los jóvenes aprovecharon para dar discursos emotivos en los que relataron cómo resultaron unidos por su visión del mundo, por el buen humor y la gratitud. Leonardo Pérez, voluntario chileno, expresó “Gracias por hacer de este un trabajo entretenido. Me llevó lecciones de liderazgo y buena voluntad”. Varios voluntarios, entre ellos Gemma Guzmán de Perú, tuvieron en común sentirse como en casa por la amabilidad de los colombianos, por la calidez en cada uno de los recibimientos y encuentros; y todos ofrecieron sus propias casas y países de origen para recibir a los colombianos que quieran viajar allí y prometieron dar testimonio de las buenas experiencias vividas en nuestro país.
Cada uno agradeció públicamente a los emprendedores que los acompañaron en el auditorio, pues afirmaron que esta fue una experiencia de aprendizajes en doble vía. Estuvieron presentes los representantes un proyecto de alimentos para mascotas (gatos y perros específicamente) y otro emprendimiento que trabaja con materiales reciclables para fabricar cámaras fotográficas.
Además, en el tiempo que los voluntarios vivieron en Bogotá, prepararon de manera especial a los grupos asesorados para la feria “En parche emprende” que se llevó el domingo 27 de agosto en la Plaza Ferial del 20 de julio. Ese día bailaron, cantaron, organizaron sus productos para la venta y mostraron al público de la localidad de San Cristóbal que están trabajando por estructurar sus proyectos y encontrar en esa labor una motivación para seguir creciendo de manera integral.
Luego de un mes de trabajo con grupos de varias localidades de la ciudad, los 12 jóvenes voluntarios se reunieron con representantes de la Secretaría de Integración Social, Colombia Joven, Organizaciones Solidarias, El Ministerio de Relaciones Exteriores, y la Agencia Presidencial de Cooperación, APC-Colombia, para exponer un balance de las actividades realizadas en un acto protocolario.
El evento inició con las palabras de María Consuelo Araújo, Secretaria de Integración Social, quien afirmó: “Bogotá ha disminuido la tasa de embarazos adolescentes no deseados lo que evita que los jóvenes se desvíen de los proyectos de vida que incluyen estudio y emprendimiento. Gracias (a los voluntarios) por abrir nuevas oportunidades en temas tan diversos como el bienestar de los animales, la danza y la fotografía. La Alcaldía quiere fortalecer este proceso y que la política pública de juventud refleje lo que está pasando en Bogotá".
Siguieron las palabras de Sandra Buitrago, Coordinadora de América Latina y el Caribe de la Dirección de Oferta de APC-Colombia, quien agradeció la contribución de los voluntarios para una Bogotá cada vez más prospera, y los animó a seguir siendo embajadores de Colombia en sus respectivos países. La Directora de Cooperación Sur-Sur de la Cancillería, Rosángela Correa, agradeció a todos los socios y afirmó que la convocatoria se volverá a abrir para el año 2018 con el deseo de aumentar los cupos para que más voluntarios vengan al país.
Erika Moreno Directora de Desarrollo de Organizaciones Solidarias también se dirigió a los voluntarios para felicitarlos por las labores adelantadas con cada uno de sus grupos. Posteriormente, Juan Carlos Reyes, director de la Dirección del Sistema Nacional de Juventud "Colombia Joven", agregó: “Ustedes tienen la voluntad de cambiar este mundo. Nos queda mucho para trabajar por la paz y vienen en un momento muy especial para ese proceso en Colombia”.
Una vez finalizadas las palabras de los representantes de las entidades que hicieron posible el programa de voluntariado de la Alianza del Pacífico, se dio inicio a las presentaciones de los voluntarios. Cada uno expuso los proyectos que habían asesorado (enseñanza de matemáticas, medicina alternativa, comunidades indígenas, fotografía, grafiti, gastronomía, huertas, danza, publicidad, comunidades LGBT, entre otras) y contaron algunas anécdotas de las semanas vividas en Colombia.