Con liderazgo comunitario región Sur de Bolívar inicia proceso sostenible en agricultura y biodiversidad
Este impulso a la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad y los servicios ecosistémicos de la región Sur de Bolívar concretarán acciones orientadas a la restauración ecológica y a la rehabilitación y recuperación de áreas afectadas social, política y económicamente.
Para ello, se realizarán actividades y servicios sostenibles que promoverán la integración del desarrollo rural con la sostenibilidad ambiental de la región, específicamente en los municipios de Simití, Cantagallo, Santa Rosa, San Pablo, (Bolívar) y Yondó (Antioquia).
Con esta firma se inicia el establecimiento de modelos de desarrollo rural, basados en la conectividad entre ecosistemas naturales y culturales, que fomenten la conservación y protección de los recursos naturales y la consolidación de economías campesinas sostenibles. Así, se trabajará en crear modelos de reconversión agropecuaria socializados y concertados (cadenas de cacao, café y ganadería) y de conservación comunitaria de áreas prioritarias de bosques y humedales implementados.
Además se fortalecerá la gobernanza local en la zona, a través de la consolidación organizativa e intergeneracional; con ello, las instancias locales participarán activamente en procesos de ordenamiento territorial en los municipios de Simití, Cantagallo, Santa Rosa y San Pablo del sur de Bolívar.
También las comunidades locales, con capacidades y conocimientos, liderarán la gobernanza ambiental intergeneracional con niños, niñas y adolescentes y se recuperará la infraestructura física para la promoción de la educación ambiental y la gobernanza adecuada y dotada (Yondó).
Los grandes beneficiarios
- 207 familias campesinas participantes estarán vinculadas con los sistemas productivos de café (57), cacao (50) y a la agricultura de transitorios y pesca (100).
- 200 niños, niñas y adolescentes vinculados a 12 instituciones educativas de los municipios que comprenden el área de acción del proyecto
- 100 mil personas, de 25 veredas y ocho corregimientos, que habitan la zona serán beneficiarios indirectos y se favorecen de los servicios ecosistémicos del territorio.