Conocido tanto por su filantropía como por los muchos hoteles que llevan su nombre alrededor del mundo, Conrad N. Hilton estableció en 1944 la fundación « Conrad N. Hilton Foundation » y en esa misma legó la mayor parte de sus bienes cuando falleció en 1979. El Sr. Hilton sentía una admiración especial por las obras de caridad de las religiosas de la Iglesia Católica, a quienes apoyó personalmente por medio de su fundación. En su testamento les pidió a los directores de la fundación que "ayudaran a las hermanas, quienes dedican su amor y sus obras al bien de la humanidad". En 1986 la fundación « Conrad N. Hilton Foundation » estableció la fundación para Hermanas « Conrad N. Hilton Fund for Sisters » para contribuir al trabajo de las hermanas ayudándolas a aliviar a los marginados del sufrimiento.